Taller de Escritura. Beker. Posgrado DICOM. FADU. UBA
Dan Waisman

Dakota

Parte de una serie de imágenes tomadas en un verano juvenil esta fotografía posee, al igual que muchas otras de misma temática, jóvenes desnudos divirtiéndose. Pero, ¿qué nos dice esto? Aparentemente, los elementos son pocos pero, aun así podemos ver y sentir también lo que el autor está transmitiéndonos. El negro que llena toda la fotografía nos da el pie a que es de noche, así como el reflejo del cuerpo por medio de una luz destellada de un flash. El principal elemento denotativo de las burbujas a la altura de las rodillas de los jóvenes nos adentra a un espacio deseado, una imagen codiciada, un momento de placer, de relajación, de distracción. El hecho de mostrar a una pareja desnuda, en el agua a la noche, sin actitud provocativa frente a la cámara, deja al espectador en una situación de atención que se desprende de la imagen para pasar al imaginario personal y colectivo, de lo que podría llegar a representar en lo personal esa situación fotografiada.
La belleza de la imagen remite directamente a los cuerpos esbeltos, desnudos, torcidos y voluptuosos, que se apoyan en el espacio generando tensión en el campo a partir de la decisión del encuadre del fotógrafo. No solo la presencia individual de cada sujeto genera atracción sino también la relación entre sí, de confianza y de los cuerpos en su forma. La idea de juego no deja de generar la reacción en el espectador, de deseo, de estar presente, de sumarse a la diversión y la vez de contrariedad, por el hecho de ver jóvenes desnudos, sin pensarlo desde un lado sexual, incrementa el placer por la atención inmóvil. El resto de imágenes sobre este tema está orientado al mismo juego, pero en distintos colores, diferentes personajes y situaciones variadas. Así igual logra mantener el registro de un grupo de jóvenes divirtiéndose en lo que podría ser sus vacaciones de verano.